Desde la Asociación Española de Pediatría (AEP) lamentan que en España la muerte súbita del lactante sea una de las causas principales de mortalidad en niños durante el primer año de vida. «Aunque su causa es desconocida, con el transcurso del tiempo se han identificado situaciones que disminuyen el riesgo del SMSL: el cambio en la posición del bebé al dormir (hay que colocarlos boca arriba) es quizá el más conocido. El uso de chupete en el momento de dormir es otro de los factores protectores».
Por ello, aportan estos consejos para la prevención de esta muerte repentina hasta los 12 meses de edad:
1. Acostar al niño boca arriba: Dormir boca abajo duplica el riesgo de muerte súbita. La posición de lado tampoco es segura. La postura boca arriba es para dormir. Cuando esté despierto es recomendable que pase todos los días un rato boca abajo, con vigilancia, para facilitar el desarrollo motor.
2. La cuna en la habitación de los padres es el lugar más seguro para dormir: El colchón del bebé debe ser firme. Evita las sábanas o los edredones sueltos, las almohadas y los juguetes blandos en la cuna.
3. Mantener un estilo de vida saludable: No fumar ni beber en el embarazo ni después. Ha de procurarse que nadie fume alrededor del bebé.
4. Darle de mamar, si fuera posible: La lactancia materna reduce el riesgo. Se recomienda la lactancia materna exclusiva durante los primeros 6 meses y complementada con otros alimentos hasta los 2 años.
5. No abrigar demasiado: El exceso de ropa o el calentamiento de la habitación aumentan el riesgo. Temperatura ideal entre 20 y 22 grados.