Crassula ovata, también conocida como planta de Jade, es suculenta nativa de Sudáfrica. Esta es una de las plantas de interior más populares, ya que se puede cultivar como un pequeño árbol, arbusto o en forma de bonsái, con poco recorte adicional. Esta suculenta popular tiene hojas ovaladas de color verde jade y flores con pequeñas flores rosadas o blancas. La planta puede alcanzar hasta 5 pies (1,5 m) de altura.
Prospera en temperaturas más cálidas, aunque puede tolerar heladas ligeras. Sin embargo, si vives en áreas con largos meses de invierno, debes cultivar plantas de Jade en interiores, ya que los largos períodos de baja temperatura seguramente la matarán. Además de no ser resistente al frío, hay pocos problemas más que puede enfrentar mientras cuida de su suculenta favorita.
La planta de Jade Puede llegar a ser pesada
La planta de Jade que crece en la maceta puede llegar a ser de raíz y pesada en la parte superior. Esto puede hacer que la suculenta se vuelque con bastante facilidad. Para evitar daños, debes trasplantar tu planta en una maceta más grande o más pesada cada dos o tres años o cuando empiece a volcarse. Si quieres repotearlo en una maceta del mismo tamaño, trata de podar las raíces y los tallos para asegurar un tronco grueso. Trata de no regar demasiado tu planta de Jade para mantenerla en su lugar.
Tenga cuidado con la Temperatura y la Luz solar
A la planta de Jade le encanta la sombra parcial. Sin embargo, para florecer, necesitará mucha luz solar. Al exponer esta suculenta al sol directo o al calor, debe tener mucho cuidado de no causar quemaduras en las hojas. Por ejemplo, trate de evitar colocar su planta de Jade detrás del vidrio a pleno sol. Demasiado calor hará que las hojas caigan e incluso que los tallos se enraicen. Las bajas temperaturas también pueden ser peligrosas. Asegúrate de que la planta no toque los cristales fríos de las ventanas en invierno y trata de protegerla de las corrientes de aire.
Riego equilibrado
Realmente hay que tener cuidado cuando se trata de regar una planta de Jade. Esta suculenta puede soportar períodos secos, pero las raíces se pudrirán si la dejas reposar en tierra empapada. La mejor manera de obtener todo lo que necesita tu planta de Jade es usar el método «remojar y secar». Weit hasta que el suelo esté completamente seco entre riego y riego. Debe hacerlo en la temporada de crecimiento, en primavera y verano, y cortar el agua por completo durante el invierno. Si sumerges tu planta bajo el agua, te lo dirá al desarrollar manchas y gotas en las hojas y el crecimiento atrofiado.
Plagas
Las cochinillas son plagas que suelen infectar a las plantas de Jade. Los reconocerás como pequeños soplos blancos de algodón. Este suculento puede ser sensible a los insecticidas, por lo que debe evitarlos tanto como pueda. En su lugar, puede limpiar las cochinillas con un hisopo de algodón empapado en alcohol.
La Planta de Jade se propaga con demasiada facilidad
Esta información es importante para saber si estás cultivando Plantas de Jade al aire libre. Esta suculenta se propaga fácilmente desde las hojas e incluso la paz del tallo que se rompe. Si está cultivando una planta de Jade en el suculento jardín al aire libre, asegúrese de contener cualquier propagación no deseada limpiando la planta de vez en cuando, eliminando los tallos rotos u hojas que se caigan.