Si un examen oral revela una lesión o anomalía en la región de la boca, es posible que se requiera que su dentista realice una biopsia oral. Este es esencialmente un procedimiento quirúrgico en el que se extrae un pequeño trozo de tejido de la legión, para que un patólogo pueda determinar la causa de la anormalidad y si es cancerosa. La lesión puede estar en el hueso o tejido blando de la boca y, en consecuencia, el cirujano dental extraerá una muestra de la encía, la mandíbula o el diente.
Tipos de Biopsias
En general, hay dos tipos de biopsias orales que su dentista elegirá. La primera es una biopsia incisional. En este procedimiento, el dentista extrae un trozo de tejido de la lesión y otro de la región sana de la encía o el diente que lo rodea, y luego se compara el tejido sano e infectado.
Una biopsia por escisión, por otro lado, es un procedimiento en el que el cirujano extirpa toda la lesión. Las bipsias por escisión generalmente se realizan en crecimientos relativamente pequeños y en partes de la boca de fácil acceso. Además de ser una herramienta de diagnóstico, una biopsia por escisión también evita que el crecimiento se propague aún más.
Hay diferentes maneras en que se puede extraer la muestra de tejido de la región de la boca. Esta elección depende de un examen cuidadoso del tipo de crecimiento y su ubicación exacta. Algunas biopsias requieren la inserción de una aguja para extraer una muestra. Una opción disponible para el cirujano es una biopsia con aguja fina. En este caso, se introduce en la boca una aguja conectada a una jeringa que recoge una muestra de células del tejido infectado. Alternativamente, se puede realizar una biopsia con aguja gruesa. En este procedimiento se utiliza una cuchilla en lugar de una aguja para extraer una muestra del tejido.
Su dentista puede incluso realizar una biopsia con cepillo. Este es un procedimiento no invasivo que se usa para tumores en regiones de la boca de fácil acceso, como la encía. En este caso, se frota con fuerza un cepillo sobre la legión para recoger muestras de tejido.
Qué hace una prueba de biopsia
Una biopsia es una herramienta de diagnóstico. Permite que un patólogo analice a fondo el tejido infectado e identifique exactamente qué está causando el crecimiento anormal. Si una prueba de diagnóstico por imágenes ya ha revelado cáncer, la biopsia ayudará a identificar el estadio y la extensión del cáncer, y si su fuente está en la boca o en otro lugar.
Preparación para una biopsia oral
La preparación para la cirugía no es muy compleja. Si es necesario realizar la biopsia en una región ósea, el dentista primero recomendaría radiografías o tomografías computarizadas (TC). Es posible que le pida que no coma nada durante unas horas antes de la biopsia. Una vez que llegue, el procedimiento generalmente comenzaría con un enjuague antibacteriano. En los adultos, las biopsias orales generalmente se realizan con anestesia local. Esto significa que usted estará completamente despierto durante el procedimiento. Sin embargo, se puede administrar anestesia general si la lesión se encuentra en un área de la boca que es difícil de alcanzar.
El proceso de recuperación
Inmediatamente después de la biopsia, tendrá entumecimiento en las encías debido a la anestesia. Esto desaparecerá en unas pocas horas y debería poder reanudar una dieta normal. En algunos casos, su dentista puede recomendar solo alimentos blandos durante un par de días. También es posible tener dolor en la boca durante unos días. Sin embargo, si el dolor persiste junto con el dolor, nota sangrado o hay hinchazón inusual, debe regresar a su dentista de inmediato.
Una biopsia oral conlleva un riesgo de infección. Sin embargo, estos casos son extremadamente raros, especialmente porque se recetan antibióticos después de la biopsia. En general, el valor diagnóstico de una biopsia es inmenso, y los beneficios superan con creces los riesgos. Puede ayudar en la identificación oportuna de un cáncer y el tratamiento posterior. Las biopsias oportunas a menudo han salvado vidas.